OPINIÓN…
Por: Roberto Dyke Rivera
Ayer falleció Adalberto “El Pelón” Rosas. Y se le recordará por ser un hombre de lucha, político íntegro, de los que ya quedan pocos.
Querido por su pueblo, fue alcalde de Cajeme… y rechazado por el poder estatal.
Cuando ganó la elección para gobernador, por el PAN, se le atravesó un presidente de la República del PRI, Miguel de la Madrid… y se la robaron.
Cuando intentó – con enorme popularidad – volver a ser candidato a gobernador, se le atravesó su mismo partido, el PAN, y ya no pudo más… y renunció.
“Es la mezquindad hacia el interior de mi partido”, se quejaba Adalberto.
Fueron los tiempos, en su segundo intento por ser candidato, cuando el delegado panista, Manuel Espino Barrientos armó la jugada sucia contra “El Pelón”.
Años en los que se decía que, en Sonora, no se movía la hoja de un árbol sin que el gobernador Manlio Fabio Beltrones no lo supiera… o no lo provocara.
Esto último no lo creía Adalberto, para quien Manlio era sí, un tipo astuto… pero que, en realidad, las leyendas urbanas eran eso…
El caso es, aquellos mismos años, un periódico semanario, denominado “De acá”, había titulado: “Zedillo no pudo con Beltrones”.
Se refería a la nominación de quien sería el sucesor de Beltrones en la gubernatura, Armando López Nogales.
Y el columnista de ese medio sostuvo: “La voluntad del gobernador se impuso a la preferencia del presidente de la República, que estaba por Bulmaro Pacheco”.
Por aquellos días, habría que concederle al semanario, en el noticiero nocturno (estelar) de televisa, la fotografía de Bulmaro apareció en el recuadro, destacándolo como “Asesor del presidente”.
En fin, a los acontecimientos que despierta el fallecimiento del “Pelón”, ya le llovieron… a las consecuencias, todavía no.
ERNESTO GÁNDARA Y ABELANDIA
En opinión de algunos, es una fiesta de amigos para comer y beber, a la que invita Ricardo Bours Castelo para festejar a su diputado federal, Abel Murrieta… aunque aquel sea el más saludado.
Para otros, en realidad es el reencuentro de una especie de fraternidad, a la que se convoca por razones de lealtades, con miras políticas para lo que venga.
A ellas acude siempre Ernesto Gándara Camou, actual senador y futuro encargado de coordinar la mesa donde se habrán de “palomear” a los candidatos del PRI para diputados federales y senadores.
Sin dejar de considerar que Ricardo Bours quiere que en Cajeme quede como candidato – y resulte alcalde – ya sea su hermano Rodrigo, o su protegido Abel…
… y en ese pleito por los negocios – ellos le dicen: política – Ricardo intenta que la llama se mantenga viva para sus futuras ambiciones… al viejo estilo del profesor Carlos Hank… ni más, ni menos.
SILVANA BELTRONES Y ALFONSO DURAZO
Crecida la popularidad de Andrés Manuel López Obrador, a quien el “gasolinazo” lo tiene en las nubes, es casi seguro que Alfonso Durazo será senador.
Es creíble que Silvana Beltrones, arropada por “el aparato”, resulte ganadora por el PRI (y a su lado Ricardo Bours, “El Pato” De Lucas o Miguel Pompa “El Potrillo”), mientras que el “ganador” (en primera minoría) sea Durazo…
… y, así, todos contentos.
Más contentos ahora que la popularidad de AMLO ya convenció a prominentes empresarios, tanto del ramo financiero como dueños de televisoras.
Apoyar a López Obrador entonces, será visto como una necesidad… el que sigue, para la salvaguarda del sistema político mexicano.
Con todo y que algunos auguren la posibilidad de algunos cambios sociales en el país.
Así que ya saben: Procuren no sacarle mucho la lengua a Alfonso Durazo… será importante en el sexenio que viene.
Hasta pronto