Gustan las reuniones de Morena en Hermosillo. Siguen plenas de entusiasmo, de cuestionamiento a funcionarios prepotentes… incluso, de juzgar a autoridades municipales elegidas a propuesta de su mismo partido: Unos hablan de supuestas traiciones, y el grito se escucha con ferocidad.
Esta dinámica de los morenos los lleva a crecer en simpatías, a fortalecerse, a continuar atrayendo la presencia de más ciudadanos a sus filas. A veces, por sus pleitos y reconciliaciones recuerdan a la “Montaña” y la “Gironda”.
Sin duda esto tiene que ver con el hecho indiscutible de que, por primera vez, en México ganó la inconformidad ciudadana, lo que significaría un tesoro que nadie quiere soltar…
Que implica discusiones, pleitos, debates (cuando se llega a ese nivel), pero que no han sido factores para desunir; y hasta hoy, por lo menos, los morenos discuten fuerte, pero no llegan al rompimiento.
¿Mantendrán ese ritmo hasta las elecciones siguientes?, de ser así, serán un partido político casi imposible de vencer.
EL PAN, PADRECISTAS DE REGRESO
El Partido Acción Nacional en Sonora mantiene su desprestigio. De hecho, si Célida López hubiera sido la candidata panista a la alcaldía, no habría ganado ni en su colonia. Postulada por Morena, ganó holgadamente.
Sin embargo, sus intereses panistas son fuertes. De ahí que en el ayuntamiento naranjero, el personal de confianza – en su mayoría – esté pintado de azul y blanco. Y Célida aún no entiende eso de la democracia y la mentalidad social de los morenos… y ni modo, cada quien se formó en su esquina… Y los morenos aguantan, no les queda otra.
Mientras, el viejo padrecista Ernesto Munro Palacios ganó la dirigencia estatal del PAN en Sonora. Y este es un hecho indicativo:
Significa, ni más ni menos, que en el peor momento del panismo sonorense, los activistas son los padrecistas, aquellos personajes a quienes les urge afianzarse de este instrumento político… un poco por protección… un mucho para intentar regresar a posiciones políticas.
Lo interesante del panismo padrecista es que varios se han beneficiado de Morena y sus triunfos… y tan campantes.
Sus beneficios en el ayuntamiento de Hermosillo son un hecho real, práctico… y por si faltara, su excelente relación con el alcalde de Cajeme, es notoria, pública.
Es más, hay quien dice que los padrecistas también le “dieron una mano” a Sara Valle Dessens cuando fue candidata a la alcaldía de Guaymas… se supone que allá también tienen gente metida en calidad de funcionarios de confianza.
Así, su red de influencia y poder es una realidad. Los padrecistas están de regreso.
Y, por supuesto, en la mira de este grupo están las elecciones venideras… y ser parte de los cuestionamientos hacia la gobernadora Claudia Pavlovich… entre más revuelta el agua, más pueden ganar. Obvio.
Den como un hecho que un gran número de ellos son parte de los comúnmente conocidos como “chairos”, los críticos feroces que han atrapado las redes sociales… donde criticar al PRI y a la gobernadora Pavlovich se ha vuelto un deporte de moda… con evidente interés de grupo.
EL PRI Y SU PELIGROSA MODORRA
La somnolencia del PRI estatal, por las razones antes expuestas (la vitalidad de Morena y el reacomodo oportunista del PAN) está resultando muy peligrosa.
La gobernadora hace su juego institucional. No puede, ni debe chocar de frente contra el gobierno de AMLO… así que su actitud es actuar con prudencia y dentro de los marcos estrictos de la ley.
Sin embargo, en el PRI la parálisis afectará — ¡en mucho!, aunque aún no se pueda precisar — el resultado de las próximas elecciones.
Más claros: Ni la prudencia y el manejo institucional los ha logrado descifrar el PRI de Gilberto Gutiérrez… sigue actuando a la vieja usanza… no hacer nada… en espera de una “línea” imaginaria… en el momento preciso en el que debiera demostrar alguna capacidad política.
Le urgen cambios al PRI estatal… y aunque resulta imposible que rompan con las viejas actitudes de respeto – hasta el besa manos – y sumisión trasnochada, les hace falta un líder más dinámico e independiente…
… y si no lo es (independiente) de pérdida que lo parezca.
Así las cosas, hasta hoy, por lo menos, MORENA aumenta su capacidad de atracción; el PAN se reacomoda en forma oportunista, y el PRI duerme la mona peligrosamente… algo tendrán que hacer… supongo…
Hasta pronto