Sheinbaum envía carta a Google para defender el nombre histórico del Golfo de México
El miércoles pasado, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, presentó una carta dirigida al director ejecutivo de Google, Sundar Pichai, en la que impugnó el reciente cambio en la denominación del Golfo de México en la plataforma Google Maps. Esta modificación, anunciada por Google, renombra la zona como “Gulf of America” para los usuarios en Estados Unidos, en respuesta a una orden ejecutiva emitida por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien busca cambiar el nombre del golfo compartido por México, Estados Unidos y Cuba.
En el documento, Sheinbaum argumentó que el nombre “Golfo de México” tiene una raíz histórica profunda, reconocida internacionalmente desde principios del siglo XVII, mucho antes de la fundación de los Estados Unidos. La mandataria destacó que dicho nombre ha sido aceptado por la comunidad internacional, incluidos los Estados Unidos desde su independencia en 1776. Además, subrayó que la denominación está registrada legalmente en los índices de la Organización Hidrográfica Internacional (OHI), que incluye a ambos países, México y Estados Unidos, como miembros.
“El nombre del Golfo de México es producto de un proceso histórico, geográfico y político que ha sido aceptado y utilizado por la comunidad internacional, incluidos los Estados Unidos, desde su independencia, y no responde a una imposición gubernamental única”, se menciona en la carta, resaltando que el nombre ha sido parte de la tradición cartográfica mundial por siglos.
La presidenta explicó que la orden ejecutiva de Trump, firmada el 25 de enero, aclara que el cambio de denominación se aplicaría solo a la plataforma continental de Estados Unidos, no a todo el golfo. Sheinbaum reiteró que el cambio de nombre solo puede afectar las aguas bajo jurisdicción de EE. UU., es decir, hasta 12 millas náuticas de la costa, de acuerdo con el régimen internacional de las zonas marinas.
“El cambio de nombre, según el decreto presidencial, se limita exclusivamente a las aguas bajo control de Estados Unidos, y no afecta a las zonas marinas de México y Cuba”, se argumenta en el documento. También se explicó que la mayor parte del Golfo de México está fuera de la soberanía de cualquier país ribereño y que el cambio no puede aplicarse a la totalidad del cuerpo de agua.
La carta hace alusión a un mapa de 1607 que designaba la región como “América Mexicana”, en un esfuerzo por mostrar la importancia histórica de la denominación del golfo. En este contexto, Sheinbaum solicitó a Google que, al buscar el término “América Mexicana” en sus mapas, se muestre dicho mapa histórico para reforzar el contexto geopolítico de la región.
El gigante tecnológico, Google, confirmó que los cambios de nomenclatura en Google Maps se aplicarán solo a los usuarios estadounidenses, mientras que en México y el resto del mundo el nombre de “Golfo de México” seguirá siendo el utilizado. Según la empresa, este ajuste se realiza conforme a su política de adoptar nombres basados en fuentes oficiales del gobierno.
El conflicto por el nombre del Golfo de México se suma a otras disputas entre México y Estados Unidos, marcadas por temas migratorios, económicos y geográficos, durante la presidencia de Donald Trump. La carta de Sheinbaum a Google busca reafirmar la importancia histórica y geopolítica del nombre y evitar que se cambie unilateralmente por una orden ejecutiva.