Ciudad de México, 13 de agosto — En la conferencia matutina de este miércoles en Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo presentó el logotipo comercial del auto eléctrico Olinia, así como los avances del proyecto de semiconductores Kutsari, ambos desarrollos emblemáticos de la estrategia federal de innovación tecnológica.
Olinia: movilidad eléctrica con identidad cultural
El emblema del automóvil, inspirado en los alebrijes, representa una liebre alada con un guiño al águila real, integrando elementos simbólicos del folclore mexicano. Sheinbaum anunció que los primeros diseños del vehículo se darán a conocer en septiembre, con una flotilla piloto proyectada para mediados de 2026.
El vehículo se plantea como una opción eléctrica accesible con precios estimados entre 90,000 y 150,000 pesos, siendo más rentable y cómodo que el mototaxi y con capacidad de carga para pequeños comercios en zonas de difícil acceso. Sheinbaum aseguró que el objetivo es mantener un costo menor al de otros vehículos de su tipo y se mostró confiada en que esta meta se cumplirá.
Roberto Capuano Tripp, coordinador del proyecto, explicó que la visión va más allá de fabricar un auto: “queremos ofrecer soluciones de movilidad para los trayectos de última milla”, y el equipo realizó investigaciones de campo para atender las necesidades reales de seguridad y funcionalidad.
El proyecto cuenta con la colaboración de más de 100 científicos y tecnólogos de instituciones como el IPN, TecNM y la UNAM, trabajando desde el Instituto Tecnológico de Puebla, donde se establecerán instalaciones definitivas.
Kutsari: chips médicos y soberanía tecnológica
Paralelamente, se presentaron los avances del Centro Nacional de Diseño de Semiconductores “Kutsari”, con sedes listas—o por inaugurarse—en Puebla (Cholula), Jalisco (Guadalajara) y Sonora (Hermosillo). El término “Kutsari” proviene del purépecha y significa “arena”, en referencia al silicio base de los chips.
El proyecto contempla tres etapas: diseño, fabricación, y ensamble/empaque de chips, con la meta de consolidarse a nivel nacional hacia 2027. Actualmente ya se desarrollan los primeros semiconductores para equipos médicos, como un prototipo que analiza creatinina en saliva para detectar problemas renales o diabetes.
Se han iniciado diálogos con empresas internacionales como Siemens, compañías coreanas, centros en Bélgica, la embajada de EE.UU., así como un convenio con Intel para acceder a su tecnología, con el objetivo de firmar al menos un contrato para el diseño de un chip comercial antes de que termine el año.
Visión compartida y justicia científica
La presidenta Sheinbaum enfatizó que, a diferencia del enfoque académico tradicional centrado en patentes o publicaciones aisladas, estos proyectos promueven colaboración interinstitucional y generan beneficios para la sociedad.
Por su parte, Rosaura Ruiz, secretaria de Ciencia, Humanidades e Innovación, afirmó que: “Olinia y Kutsari son el inicio de una nueva etapa del país, donde las ciencias y humanidades se convierten en justicia social, y la tecnología es soberanía”.
El evento contó también con la presencia de Arturo Reyes Sandoval (IPN) y Ramón Jiménez López (TecNM), junto con investigadores participantes de ambas iniciativas.