Guaymas, tres legisladores locales…
Víctor Fonseca
Pues sí resultó finalmente como lo habíamos advertido: Guaymas tiene tres representantes en la legislatura número 64 de la Cámara de Diputados, situación que, en lo personal, no sé si tenga algún precedente. Al menos no, que yo recuerde.
Ellos son Sebastián Orduño Fragosa, que repite en la curul tras su proceso de reelección, Jazmín Gómez Lizárraga, a quien hay que reconocerle que peleó con fuerza y mucho corazón su derecho a estar dentro del Congreso local, ambos del Partido del Trabajo, y el profesor César Adalberto Salazar López de Nueva Alianza, que entró también por el beneficio plurinominal.
Este último ha sido secretario general de la sección 28 del sindicato magisterial, y aunque su presencia ha sido más en círculos relacionados con su actividad laboral-sindical, creo que alguna vez formó parte ya del cabildo en el Ayuntamiento local. Poco conozco de su historial en los menesteres del quehacer público.
¿Y eso qué?, se preguntarán muchos escépticos sobre el hecho de que tres nativos de esta bendita tierra estén ya en la diputación local.
Ya lo comentamos en columna anterior, que el antecedente bélico entre alcaldes y diputados locales (a veces hasta los federales se pelean con el o la alcalde en turno) está rico en historietas de zancadillas y obstáculos por temas eminentemente políticos, pero creo que en esta ocasión, la oportunidad se describe sola.
Podría empezar a asearse ese expediente tan lleno de conflictos y tensiones si las cuatro partes inmiscuidas en el beneficio de Guaymas (obviamente, incluimos a la alcaldesa reelecta Karla Córdova González) se sientan a tomarse un café en el San Enrique y platican sobre lo que todos juntos, aprovechando que están en el mismo rubro ideológico –bueno, al menos la apariencia lo indica– pueden hacer para que nuestro ilustre puerto recupere el camino de un mejor y mayor progreso.
Esperar cada uno a que el otro le llame para ponerse de acuerdo en el día y la hora, sería como jugar al Pin-Yex o a la Matatena. Con uno que tome la iniciativa, algo bueno podría empezar a gestarse para Guaymas y sus habitantes. Ustedes, señoras y señores, tienen la palabra.
